|
COMO ELEGIR UN COLCHÓN
Buscas un colchón? Te ayudamos a elegir. La oferta de colchones es amplia y variada, y no siempre tenemos claro qué colchón nos conviene más. Te damos las claves para elegir tu colchón, una decisión que depende de muchos factores: el peso, la postura en
|
Un tercio de nuestra vida transcurre durante el sueño, que debe ser reparador para que nos ayude a recuperarnos de los esfuerzos diurnos. Elegir un buen sistema de descanso se convierte, por tanto, en una cuestión prioritaria. Según un informe de EBIA (European Bedding Industries' Association), España es el país europeo en el que más se alarga la duración de los equipos de descanso. El 20% de los españoles cree que un colchón se puede usar durante 20 años, por lo que somos quienes con menos frecuencia los cambian: lo hacemos cada 12'6 años de media, y para el 68% de los entrevistados, la renovación se produce únicamente cuando el desgaste, las roturas y la alteración de la forma son evidentes.
LAS CLAVES DE LA ELECCIÓN:
- ¿Cómo duermes?
Si duermes boca arriba, en posición supina, sobre la espalda, debes escoger colchones duros.Si duerme de lado, te puede convenir un colchón de menor firmeza, que permita al hombro hundirse levemente, hasta encontrar una posición cómoda.
- ¿Cuánto pesas?
Si pesas bastante, necesitarás colchones firmes, que ofrezcan buena sujeción. En un colchón blando te hundirías en exceso.
Las personas más ligeras necesitan también colchones de mayor flexibilidad, que se adapten a su forma para repartir mejor el peso.
- ¿Te mueves mucho?
Si te mueves mucho mientras duermes te conviene un colchón algo más duro que te permita girarte sin esfuerso. En un colchón blando te hundirías demasiado, y te costaría girar, lo que resulta incómodo.
- ¿Pasas calor?
Si pasas calor, sudas con facilidad o vives en un lugar cálido, los colchones de muelles pueden convenirte más, pues se ventilan mejor y son más frescos.
Si eres friolero o vives en un lugar frío, los modelos de espuma, de látex o de material viscoelástico guardan más el calor.
- Otras cuestiones
Si deseas una base articulada, necesitas un colchón flexible (de espuma, de látex o de muelles embolsados).
Si eres alérgico al polvo o asmático, se recomienda usar un colchón de espuma o de látex con una funda lavable (salvo, claro está, que seas alérgico al látex).
LA FIRMEZA DE UN COLCHÓN
Un buen colchón debe repartir el peso del cuerpo de la manera adecuada. Debe ser lo suficientemente firme para sostener bien el cuerpo, pero no tanto que resulte incómodo. En los últimos años se ha extendido la idea de que un colchón duro es siempre lo mejor para la espalda. No es así: en último término, la dureza, o mejor, la firmeza del colchón es una cuestión de preferencia personal, y de peso.
Un buen colchón debe respetar la curvatura natural de la columna vertebra, boca arriba y alineada mientras duermas de lado.
Si el colchón es demasiado duro, no se adapta al cuerpo. Esto por un lado permite una mejor aireación, pero por otra hace que el peso del cuerpo no se distribuya adecuadamente por toda la superficie del colchón.Colchón rígido, la espalda no se adapta.
En un colchón demasiado blando, el cuerpo tiende a hundirse. Esto presenta distintos problemas: la sensación de calor aumenta, porque no circula el aire, y por otro lado la columna vertebral y la espalda no están bien sujetas, ni al dormir boca arriba, ni de lado.Colchón blando, la curvatura de la columna se ve afectada.
|
|
|
|